Si bien era un rival directo en la lucha por no descender, lo que hizo que este triunfo fuera tan importante fue la manera en que el equipo de la colectividad judía se llevó esta victoria.
Se encontraba 3-7 en el marcador y quedaba en la tabla en la zona de descenso directo al igual que su rival, Parque.
Teniendo en cuenta que era uno de los partidos a ganar por Hebraica, ir perdiéndolo, en casa y por esa diferencia, seguramente hubiera sido cuesta arriba levantarse para pelear en las últimas 10 fechas.
Pero los de Pilar sacaron a relucir su mejor juego y amor propio para dar vuelta la historia, y ganar 9 a 7 en un partido que quedará en la memoria de todos en caso de que Hebraica pueda llegar a mantener la categoría.
Por su parte, Parque sigue en caída libre y está más a la expectativa de una mala racha de los últimos cuatro ascendidos que lo podrían salvar de ir al descenso directo, ya que la hazaña de salvarse por motus propio se ve cada vez más lejos.
La yapa de Hebraica, fue que no solo no perdió, no solo no quedó en descenso directo sino que también salió de la zona de promoción.
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